En cualquier área, la docencia es uno de los caminos más delicados y comprometedores que podemos escoger.
Cuando decidimos enseñar, asumimos la responsabilidad de formar no sólo futuros docentes, sino pianistas ejecutantes, compositores y productores musicales.
Más allá de todo esto, nuestro gran compromiso es el de formar seres empáticos e interesados en “el otro”, buscadores, investigadores; pianistas entrenados para ampliar sus propios horizontes, aumentar y complementar su conocimiento musical con otros estudios que puedan enriquecer su actividad como docentes.