¿Pensamos alguna vez que en algún periodo de nuestras vidas podíamos comunicarnos, estudiar, trabajar, a través de la web?
Probablemente muchos de nosotros lo habíamos visualizado pero no teníamos la certeza de que lo íbamos a experimentar y hacerlo parte de nuestro cotidiano.
La transmisión de información y conocimientos a distancia representa hoy en día una de las vías más asequibles para la gran mayoría, lo cual no quiere decir que los resultados sean siempre inmediatos y mágicos, pues igualmente debemos invertir tiempo, continuidad y esfuerzo para lograr nuestras metas.
Consideremos entonces, los beneficios que obtenemos al implementar las clases virtuales de un instrumento musical, tanto para el docente como para el estudiante.
En el caso del docente quizás se hace más cuesta arriba, pues se ve comprometido aún más a planificar con especial cuidado y detalle, y formular de antemano, una estrategia de trabajo en la que el plan de estudios y la evaluación continua deben estar muy organizados, medidos y adecuados para cada tipo de estudiante, de tal manera que lo lleva a invertir un tiempo extra en el que debe evaluar todas las aristas posibles que puedan presentarse eventualmente durante sus clases.
Sin embargo, en su espacio de trabajo cuenta con todos sus archivos, con todo el material necesario, además de su instrumento en el que puede fácilmente demostrar con ejemplos directos, cualquier pasaje o fragmento que sea necesario explicar visualmente.
El estudiante, en cada caso, tendrá su instrumento a la mano y todo el material que requiere le llegará vía web; igualmente le será mucho más cómodo y no tendrá necesidad de desplazarse, y así la comunicación y asistencia es inmediata.
Todos pensaríamos que la distancia física es un impedimento para una clara y cálida comunicación, pero la virtualidad flexibiliza y amplía enormemente nuestra capacidad para hacer llegar al otro nuestro conocimiento, nos invita a depurar nuestras destrezas y habilidades para comunicar, para solucionar, y nos invita permanentemente a seguir buscando mejores caminos para transmitir nuestros oficios.
Sigamos este viaje…